Según la Fiscalía, entre enero y febrero 2019 se registraron 4.927 denuncias de abuso sexual en el país. En promedio, ocho de cada diez víctimas son menores de edad. Conoce qué son las cámaras Gesell, por qué son claves para la investigación de estos casos y cuántas hay en el Perú.
Pese a que el daño sufrido es irreparable, el uso de la cámara Gesell permite que la persona abusada pueda obtener justicia sin ser revictimizada. La cámara Gesell es un ambiente administrado por el Instituto de Medicina Legal (IML) del Ministerio Público y dividido en dos espacios. Uno es solamente para la entrevista con el menor y la otra es donde estarán presentes los fiscales, abogados y padres. Ambos ambientes estarán separados por una pared de vidrio espejado.
La implementación de las cámaras Gesell no ha ido de la mano con la demanda por los casos. La primera cámara se inauguró en el año 2008 y once años después, solo hay 75 cámaras en todo el Perú. De este número, 12 están inoperativas por falta de equipamiento o personal, según información de la Fiscalía a la que accedimos por medio de una solicitud de Acceso a la Información. El costo de cada cámara Gesell es de S/. 97.886,31. En ese presupuesto no está contemplado el costo del personal, como psicólogos, asistentes administrativos y digitadores.
¿Cómo es una la cámara gesell?
“Una cámara Gesell es el ambiente adecuado que permite que un menor de edad pueda ser entrevistado por un psicólogo especialista y que cuente su experiencia de un hecho de violencia, ya sea física, sexual, psicológica”, señala la fiscal Katharine Borrero, de la Fiscalía Provincial Transitoria Especializada en Violencia contra la Mujer y los Integrantes del Grupo Familiar de Lima.
En la sala de entrevista solo estarán el psicólogo y el menor donde conversarán sobre su caso, que previamente el profesional médico ya estudió. “Los espectadores ven a través del vidrio al psicólogo y menor de edad y se van haciendo las preguntas. Primero para llegar a formar con el declarante una relación de asertividad para que, a través de la empatía, pueda contar su historia. Esa entrevista única tiene la naturaleza de ser irrepetible, por eso se graba”, indica la fiscal.
Durante la entrevista, el psicólogo deberá lograr que el niño exprese “cómo sucedieron los hechos”. “La hora y la descripción del lugar, identificar al supuesto agresor, no solamente de nombre, sino también su descripción física, establecer el vínculo con el supuesto agresor, determinar la frecuencia, intensidad y desde cuándo vienen sucediendo los hechos, precisar la existencia de otras víctimas e indagar las motivaciones que exista en la denuncia”, detalló la fiscal.
En la segunda parte de la entrevista, el psicólogo recibirá, a través de un pequeño teléfono, las preguntas que tienen los fiscales y los abogados. “Escuchará las preguntas y las convertirá en una entrevista para que el niño no se sienta interrogado, sino que sea una conversación”, indicó la magistrada. El testimonio será grabado en audio y, además, transcrito en un acta. El testimonio de cámara Gesell tendrá el valor de una prueba preconstituida, afirmó Borrero.
El reto: miles de casos y pocas cámaras
Con las 63 cámaras Gesell actualmente operativas se atienden los miles de casos que se reportan al año de violencia sexual contra niños y adolescentes. Según el Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público, en el 2018 se registraron 28.067 denuncias por abuso sexual, mientras que, entre enero y febrero 2019 hubo 4.927. Ocho de cada diez víctimas eran menores de edad.
El tener pocas cámaras para cada vez más casos denunciados origina deficiencias en el acceso a justicia. “Se genera una sobrecarga que hace que el tiempo para las citas en las cámaras Gesell sean muy largos, de uno hasta tres meses”, señala Matilde Cobeñas, adjunta para la Niñez y Adolescencia de la Defensoría del Pueblo.
En marzo de 2019, fue aprobada y publicada la Ley N.º 30920 que declara de interés público y de prioridad nacional la implementación progresiva de cámaras Gesell. Para la funcionaria, esto “demuestra que el Estado está reconociendo que hay una deficiencia que es necesaria superar”.